Seguimos con los complementos alimentarios más conocidos, para ver para qué su utilizan y para que "dicen" que se utilizan. Cuanto más sepamos, mejor no os parece?
Gracias a tod@s por leerme!
ÁCIDO HIALURÓNICO
El ácido hialurónico o sus siglas AH, es un polisacárido que presenta funciones estructurales. De textura viscosa, existe en la sinovia, humor vítreo y tejido conjuntivo colágeno de numerosos organismos. En seres humanos destaca su concentración en las articulaciones, los cartílagos y la piel.
Su uso en cosmética, el sector de mayor demanda, se conoce desde 1996, aunque cubre múltiples necesidades. El ácido hialurónico posee la capacidad de retener el agua en un porcentaje equivalente a miles de veces su peso. Es por ello que se emplea para la hidratación de la epidermis, ya que reconstituye las fibras que sostienen los tejidos de la piel, dándole así una mejor forma.
El ácido hialurónico se utiliza ahora de forma común, como ingrediente en productos cosméticos, debido a sus propiedades hidratantes.
Su utilización, además se extiende desde el campo médico y quirúrgico hasta el deportivo, puesto que el ácido hialurónico forma parte de las articulaciones y reduce los tiempos de la recuperación de las lesiones.
En la actualidad se puede encontrar en cremas, cápsulas y en distintos preparados comerciales, como la mezcla de colágeno y ácido hialurónico, además del ámbito de medicina estética, en inyecciones.
Ácido hialurónico infiltrado
Cápsulas orales
Cremas con AH
CARTÍLAGO DE TIBURÓN
El cartílago de tiburón es una fuente de proteínas, mucopolisacáridos, (sustancias tipo gel que se encuentran en las células del cuerpo), calcio y fósforo. En oriente lleva utilizándose desde tiempos inmemoriales, como recetas cotidianas de cocina.
Actualmente y después de numerosos estudios, se ha descubierto que el cartílago de tiburón es algo más que un ingrediente culinario. Es anti-inflamatorio y analgésico, además de estimular el sistema inmune y ser también un potente inhibidor tumoral. Por lo que es muy recomendable en todo tipo de dietas y su ingestión no presenta problemas ni reacciones adversas.
El cartílago de tiburón es uno de los remedios naturales más eficaces para prevenir y tratar enfermedades como la artritis, el reuma, la osteoporosis y diversos estados inflamatorios.
Esto se debe principalmente, a que el cartílago de tiburón, actúa como anti-inflamatorio y destruye los vasos sanguíneos que suelen aparecer en estados patológicos articulares y estos vasos son los responsables del dolor y la impotencia funcional.
Está formado por un tejido conectivo muy resistente y elástico que a diferencia del tejido de otros mamíferos, presenta una gran resistencia a ser dañado frente a diversos agentes patógenos. Además, aporta proteínas, calcio, colágeno y unas sustancias llamadas glucosaminoglicanos, que al ser incorporadas a nuestra dieta, actúan en las membranas de las articulaciones, protegiéndolas del deterioro.
El cartílago de tiburón se suele consumir en forma de complemento nutricional y la mayoría de las veces, suele ir acompañado de algún complejo vitamínico, como por ejemplo, la vitamina D, que es esencial para la fijación del calcio en el organismo. Se puede encontrar en polvo y/o cápsulas.
Tras toda esta batería de información, hay otros autores que creen que las investigaciones realizadas sobre el cartílago de tiburón, son insuficientes para afirmar todas las bondades que se le atribuye desde la experiencia y la medicina popular, aunque sí se han registrado algunos casos de alergias y aumento de los niveles de Calcio en sangre.
PRECAUCIONES
No administrar en embarazo, lactancia ni personas cuyos niveles de calcio son naturalmente, demasiado altos.
Cartílago de tiburón
Tipos de cartílago
Acción analgésica
KRILL
Los eufausiáceos, (Euphausiacea), son un orden de crustáceos malacostráceos, conocidos genéricamente como krill; son parecidos a los camarones, de unos 3 a 5 cm de longitud, muy abundantes en todas las aguas circundantes del Continente Austral. Es alimento fundamental de numerosas especies antárticas, como pingüinos, ballenas, peces y otros animales. Una rotura en la cadena alimentaria, de la cual el krill forma parte, podría tener consecuencias catastróficas en términos ecológicos.
El krill es considerado un gran tesoro, debido a sus atractivas características nutricionales, entre las que destacan su alto valor protéico.
El porcentaje de proteínas contenido en este pequeño crustáceo, alcanza el 70% de su peso, de las cuales, un 46% se componen por aminoácidos esenciales, es decir, que nuestro organismo no puede sintetizar.
Es también, poseedor de ácidos grasos Omega 3, lo que convierte al krill en un alimento cardioprotector, al favorecer el incremento del colesterol HDL, denominado colesterol "bueno".
Por otro lado, no podemos olvidar su alto contenido en minerales y oligoelementos, como el calcio, magnesio, fósforo, selenio, zinc, sodio, yodo, flúor, cobre, potasio y manganeso.
Toda su composición nutricional es realmente favorecedora para la salud humana, porque no solo es un alimento de alto valor protéico, sino que posee ácidos grasos esenciales y minerales que destacan por su acción antioxidante y fundamental en el organismo.
Pero no todo son buenas nuevas, puesto que hay gran controversia a la hora de explotar el krill para dedicarlo al consumo humano.
Si bien ya se consume en Japón y Rúsia desde hace varios años, aún su ingesta no está difundida a nivel mundial, pero dadas sus características nutricionales y la escasez de alimentos actual, muchos son los especialistas y estudios que pretender dedicar este crustáceo a salvar vidas humanas. Sin embargo, el tema ha generado discusión porque si bien, las poblaciones de krill son gigantescas, han decrecido ampliamente en los últimos 30 años.
Actualmente se comercializa en perlas o en aceite.
Krill
Bancos de krill
Aceite de krill en cápsulas
GLUCOSAMINA
La glucosamina es un amino-azúcar, que actúa como precursor de la glicosilación de las proteinas y los lípidos.
(la glicosilación o glucosilación es un proceso bioquimico en el que se adiciona un glúcido a otra molécula, que se denomina aceptor. La molécula aceptora puede ser de naturaleza protéica, lipídica, etc).
Se encuentra principalmente en el exoesqueleto de los artrópodos, en la pared celular de los hongos y en otros muchos organismos, siendo el monosacárido, ( hidrato de carbono que no puede descomponerse en otro más sencillo, sería el "azúcar más simple"), más abundante. Se sintetiza comercialmente mediante la hidrólisis de exoesqueletos de crustáceos, (la hidrolisis es la descomposición de una sustancia orgánica por acción del agua).
La glucosamina es utilizada de forma bastante común en el tratamiento de la artritis y la artrosis, a pesar de que su aceptación como medicamento terapéutico sea variable.
Diferentes estudios y autores, sostienen que favorece el desarrollo de los tejidos cartilaginosos. La glusosamina aportada como suplemento dietético, se emplea en la reconstrucción de los cartílagos.
Su empleo en la osteoartritis es aparentemente seguro, como muestran los resultados obtenidos hasta el momento, en diversos ensayos clínicos.
Dado que la artritis y la osteoartritis, son enfermedades autoinmunes, en las cuales la glucosamina ha demostrado su efecto benéfico, se está ensayando su efecto inmunomodulador en otras patologías de este tipo.
Sin embargo, un análisis publicado en el British Journal el 2010, muestra que es ineficaz en el tratamiento en pacientes con osteoartritis de cadera o rodilla y un nuevo estudio publicado en 2014 demuestra que la suplementación con glucosamina, no produce beneficios estructurales en personas con dolor crónico de rodilla...
Actualmente se comercializa en polvo y en tabletas.
Como veis, en este tipo de productos, siempre aparecen las dos caras muy bien diferenciadas. La "medicina popular y la experiencia personal" y los "estudios científicos serios". Opinad vosotros mismos.
Acción de la glucosamina
Presentación más común
OMEGAS 3 Y 6
OMEGA-3
Los ácidos grasos omega 3, són ácidos grasos esenciales poliinsaturados, es decir, el organismo humano no puede sintetizarlos a partir de otras sustancias y se encuentran en alta proporción en los tejidos de ciertos pescados, por regla general, del pescado azul y en algunas fuentes vegetales, como el aceite de perilla, semillas de lino, de chía, los cañamones y las nueces. Algunas fuentes de omega 3 pueden contener otros ácidos grasos, como los omega 6.
Se ha demostrado experimentalmente, que el consumo de grandes cantidades de omega-3 aumenta considerablemente el tiempo de coagulación de la sangre, lo cual explica por qué en comunidades que consumen muchos alimentos con este tipo de ácidos grasos, como los japoneses, por ejemplo, la incidencia de enfermedades cardiovasculares es sumamente baja.
Algunas experiencias sugieren que el consumo de omega-3 tiene efectos benéficos sobre el cerebro y que en el embarazo, puede tener una buena influencia sobre el bebé.
Altas cantidades podrían disminuir los efectos de la depresión e incluso grupos de niños en edad escolar, aumentaron su rendimiento después de ingerir perlas con aceite de pescado rico en omega-3.
Sin embargo se debe tener cuidado al ingerir aceites de pescado como suplemento alimenticio, por el riesgo de consumir cantidades peligrosas de dioxinas, mercurio y otros metales pesados presentes en muchos de ellos.
El omega-3 se encuentra añadido a ciertos alimentos funcionales, que son enriquecidos artificialmente, como puede ser la leche, la bebida de soja, los huevos, etc.
Los ácidos grasos omega-6 también son esenciales, pero tienden a consumirse en exceso en las dietas modernas, sobre todo por su inclusión en productos de comida elaborada. Los estudios han demostrado que ambos ácidos grasos, no sólo hay que tomarlos en cantidades suficientes, además hay que guardar una cierta proporción entre ambos.
Se encontró que los humanos evolucionaron consumiéndolos en una proporción de 1:1, por lo que esta, sería la proporción óptima que brinda numerosos beneficios para la salud.
Sin embargo, algunos estudios de nutrición, demuestran que las dietas occidentales, más aún la típica dieta estadounidense, pueden tener proporciones de 10:1, ( lo cual tiene consecuencias negativas para la salud), e incluso hasta 30:1. Disminuyendo esta razón, al menos 5:1 entre omega-6 y omega-3, beneficia a los asmáticos, de 4:1 ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares hasta en un 70%, 2-3:1 ayuda en la artritis reumatoide y el cáncer colorectal.
Recientes estudios publicados en Psychosomatic Medicine, hallaron que cuanto más alto era el nivel de ácidos grasos omega-6 en la sangre de los participantes en el estudio, más probabilidades tenían de sufrir síntomas de depresión y tener altos niveles de sustancias sanguíneas inflamatorias.
Las fuentes más ricas de omega-3 son los peces de aguas frías, incluyendo el salmón, pez que supuestamente tendría el más bajo nivel de contaminación, pero hay otras fuentes importantes, como el pescado azul, como por ejemplo, la sardina.
En el mundo vegetal, la chía o la salvia hispánica son apreciadas por su concentración de omega-3, además, sumamente estable. La Sacha Inchi, una variedad de maní originario del amazonas y se encuentra principalmente en Perú, posee un 48% de omega-3.
Otras fuentes vegetales son: las semillas de lino y calabaza. También existen otras alternativas, pero no resultan igualmente útiles, por tener también mucho omega-6, como las nueces o el aceite de colza y para mantener un equilibrio saludable, deberían combinarse semillas de lino con nueces u otros frutos ricos en omega-3.
Las semillas del cáñamo mantienen un porcentaje perfecto entre ambos omegas, 3 partes de omega-3 y una parte de omega-6. Son económicas en tiendas de alimentos de animales, pero tiene el inconveniente de tener una cáscara muy dura, por lo que su consumo resulta muy desagradable. La mejor forma de consumir este alimento, es en la realización de la leche, batiendo las semillas con agua para su posterior filtrado con bolsas de filtro diseñadas para esto o con máquinas para hacer leche de frutos secos. Se conserva 48h refrigerado, manteniendo todas sus propiedades nutricionales.
Un estudio del investigador Joan Sabaté, apunta que los ácidos grasos omega-3 que contienen las nueces, son más efectivos para reducir el colesterol en sangre, que los del pescado y que
en general, desequilibran menos la proporción , las carnes de animales criados con pasto, que los criados con grano.
Y tras todo esto, resulta que existen pocos ensayos clínicos que pongan en evidencia que el efecto reductor de los trigrlicéridos, disminuya el riesgo de enfermedad cardiovascular...
Perlas de aceite de salmón
Nueces
Semillas de chía
OMEGA-6
Los ácidos grasos omega-6 son un tipo de ácido graso, comúnmente encontrado en los alimentos grasos o la piel de los animales. Estudios recientes han encontrado que niveles excesivos de omega-6, comparados con omega-3, incrementan el riesgo de contraer diferentes enfermedades, incluyendo la depresión.
Los riesgos de alta concentración o consumo de omega-6, están asociados con ataques al corazón, AVC, o accidentes vasculo-cerebrales, artritis, osteoporosis, inflamaciones, cambios de ánimo, obesidad y cáncer. Los medicamentos actuales están hechos para tratar y controlar los efectos dañinos de los ácidos grasos omega-6.
Los omega-6 de origen vegetal, son los precursores de las prostaglandinas "buenas", de serie 1, con capacidad anti-inflamatoria. Consiguen fluidificar la sangre, reduciendo el riesgo de trombos, mejorando la circulación y disminuyendo el riesgo cardiovascular y la hipertensión.
Los omega-6 de origen animal son precursores de las prostaglandinas de serie 2, que tienen un efecto contrario a las anteriores, pues aumentan los procesos inflamatorios y favorecen la coagulación sanguínea. Estos ácidos grasos no son perjudiciales en sí mismos, pues cumplen funciones necesarias para el organismo, pero no hay que excederse en su consumo.
Las fuentes dietéticas de ácidos grasos omega-6 incluyen: nueces, pan integral, la mayoría de los aceites vegetales, huevos y aves de corral, soja y aguacate.
Pan integral
Aguacate
Bueno! y hasta aquí la entrada de hoy!
Feliz jueves y dulces sueños...
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